Empresa General Urquiza
AtrásEmpresa General Urquiza, ubicada en María de Quiroga 2690 en la ciudad de La Rioja, es una de las agencias de turismo y transporte de pasajeros con mayor trayectoria en la región. Su presencia física en la ciudad, complementada por un sitio web funcional para la compra de pasajes y múltiples canales de contacto, la posiciona como una opción accesible para quienes necesitan planificar un viaje. La compañía declara en su misión corporativa un compromiso con la "alta prestación de servicio", la "confiabilidad y excelencia", pilares que buscan sustentar sus 90 años de historia. Sin embargo, un análisis detallado de las experiencias de sus usuarios revela una realidad compleja y, en muchos casos, diametralmente opuesta a sus postulados oficiales.
Atención en la Terminal: Un Punto de Partida Desigual
Uno de los aspectos que a menudo se destaca de forma positiva es la conveniencia de su punto de venta en La Rioja. La oficina opera con un horario de atención sumamente amplio, funcionando de lunes a sábado desde las 8:00 hasta la medianoche, y los domingos con un horario partido pero igualmente extenso. Esta flexibilidad es un beneficio innegable para los clientes, permitiendo la gestión de pasajes o consultas fuera del horario comercial tradicional. Incluso, una de las reseñas, a pesar de ser muy crítica con el servicio en general, califica la atención en la boletería como "excelente". Este es un detalle importante, ya que sugiere que la experiencia inicial de comprar pasajes de colectivo puede ser satisfactoria, generando una expectativa que, según numerosos testimonios, no se cumple en las etapas posteriores del servicio.
El Servicio de Encomiendas: Un Canal con Fricciones
Más allá del transporte de pasajeros, la empresa ofrece un servicio de encomiendas, una opción vital para muchos particulares y comercios. No obstante, este servicio también es objeto de críticas severas. Los usuarios reportan una notable falta de consistencia en los horarios de atención de esta área específica, que al parecer se modifican sin previo aviso, causando inconvenientes a quienes necesitan despachar o retirar paquetes. A esto se suma una percepción de desgano y mala actitud por parte del personal encargado, un factor que deteriora la confianza en un servicio donde la fiabilidad y el buen trato son fundamentales.
La Experiencia de Viaje: Entre la Promesa y la Realidad
El núcleo de cualquier empresa de transporte reside en la calidad del viaje que ofrece. Es en este ámbito donde Empresa General Urquiza acumula la mayor cantidad de valoraciones negativas, que señalan fallas sistémicas en puntualidad, confort, mantenimiento de la flota y profesionalismo del personal a bordo.
Puntualidad: La Gran Deuda con el Pasajero
La impuntualidad parece ser la norma y no la excepción. Las quejas no hablan de demoras menores; los usuarios describen retrasos de entre 40 minutos y hasta 3 horas como algo "normal". Esta falta de fiabilidad tiene consecuencias directas para los viajeros, que pueden perder conexiones, llegar tarde a compromisos importantes o simplemente sufrir un estrés innecesario. Los testimonios van más allá de las simples demoras en la salida. Se reportan casos de unidades que sufren averías en mitad del trayecto, como un autobús que recurrentemente se queda detenido en la localidad de Patquia, dejando a los pasajeros varados sin información clara sobre la continuación del viaje. Irónicamente, también hay reportes de colectivos que parten antes de la hora programada, provocando que pasajeros que llegan puntualmente a la terminal de ómnibus pierdan su viaje. Esta inconsistencia total en el cumplimiento de los horarios es uno de los puntos más críticos y desalentadores para los potenciales clientes.
Confort y Estado de la Flota: Un Viaje Incómodo
Aunque la empresa promociona una flota moderna, las experiencias de los viajeros pintan un cuadro muy diferente. Los comentarios describen un servicio que a menudo se presta en unidades viejas y mal mantenidas. Uno de los problemas más citados es la climatización: en viajes durante épocas de frío, se denuncia que la calefacción no se enciende, mientras los conductores abren las puertas en cada parada, sometiendo a los pasajeros a bajas temperaturas. La higiene es otro factor de descontento, con menciones a baños sucios, sin papel higiénico y en condiciones deplorables. El mal estado de los asientos, que no se reclinan o están rotos, y hasta goteras dentro del vehículo durante días de lluvia, completan una serie de deficiencias que hacen de los viajes en autobús largos una experiencia sumamente incómoda y precaria. Se menciona específicamente que los autobuses destinados a ciertas rutas, como la de Catamarca, son de una calidad superior, lo que genera una sensación de discriminación y maltrato hacia los usuarios de los trayectos con vehículos más deficientes.
Seguridad y Servicio a Bordo
Más allá de la comodidad, surgen preocupaciones sobre la seguridad. Un testimonio describe a un conductor manejando a una velocidad excesiva, generando miedo entre los pasajeros. A esto se suma la percepción de una total indiferencia del personal de a bordo hacia las necesidades de los viajeros. Se critica que en trayectos de más de siete horas no se realicen paradas programadas para que los pasajeros puedan estirar las piernas o usar un baño en condiciones, mientras que los conductores sí se detienen para sus propias necesidades. Este trato desigual refuerza la idea de que el bienestar del cliente no es una prioridad. Incluso se ha reportado un caso de robo de una computadora de una valija despachada en la bodega, lo que introduce una grave preocupación sobre la seguridad del equipaje.
Responsabilidad Corporativa y Precios
La falta de responsabilidad ante los problemas es otra constante en las críticas. Un pasajero relata haber comprado un pasaje en Urquiza sin ser informado de que el servicio era operado por otra compañía, lo que le hizo perder el viaje sin que la empresa asumiera responsabilidad alguna. Otro caso expone haber pagado por un servicio "suite" de mayor categoría y haber sido ubicado en un asiento "cama" de menor valor, sin recibir explicaciones ni un reembolso por la diferencia. Estas situaciones evidencian una deficiente comunicación y una cultura de no hacerse cargo de los errores.
Este cúmulo de deficiencias se vuelve aún más frustrante para los usuarios cuando se considera el factor precio. Varios clientes afirman que Empresa General Urquiza suele tener las tarifas más altas en las rutas que opera. La percepción es que se paga un precio premium por un servicio de baja calidad. Esta situación se ve agravada por lo que un usuario describe como una posición de monopolio en ciertos recorridos, donde el grupo empresarial (que incluye a Sierras de Córdoba y Chevallier) es la única opción, dejando a los viajeros sin alternativas y obligándolos a aceptar las malas condiciones. En definitiva, la relación costo-beneficio es, según las opiniones de agencias de viajes y clientes, extremadamente desfavorable.